La acrilamida patatas es una cuestión que preocupa desde hace tiempo, pero en la que se ha puesto el foco en los últimos años.
La preocupación por la salud es cada vez mayor. De hecho, son cada vez más las personas que se preocupan por comer bien dentro y fuera de casa. Y en esa tendencia del «somos lo que comemos», cuidando cada alimento que nos llevamos a la boca, aparecen cuestiones importantes que forman parte incluso de la agenda informativa. En este caso queremos exponer en nuestro blog una de las más notorias desde el año pasado: la acrilamida patatas.
Probablemente hayas escuchado hablar del tema. Pero para entenderlo mejor, cabe comenzar por definir qué es eso de la acrilamida patatas. Y antes de asociarlo al tubérculo, conviene saber a qué hace referencia el concepto de manera general.
Acrilamida patatas: entendiendo el compuesto químico
Si bien se ha hablado mucho de la acrilamida patatas, no solamente se encuentra el compuesto en el tubérculo una vez cocinado. De hecho, la acrilamida se produce cuando los alimentos que contienen un aminoácido llamado asparagina se calientan a altas temperaturas con presencia de ciertos azúcares. Esto ocurre con varios alimentos, aunque al ser catalogada por OMS como “probable carcinógeno humano”, la mayor alerta está en las patatas fritas, el pan, cereales de desayuno y las galletas , las aceitunas negras enlatadas, el café y el zumo de ciruela..
En el caso de la acrilamida patatas, debido a que son uno de los alimentos más populares, tanto en casa como en los restaurantes las patatas fritas son uno de los platos preferidos, ya sea como acompañante o preparadas de distintos modos como un principal, la preocupación resulta ser mayor. Tanto es así que se están buscando soluciones a nivel mundial. Por ejemplo, el Departamento de Agricultura de EE.UU aprobó una variedad de patata transgénica en 2014 que evitaba la formación de acrilamidas al ser cocinadas.
Cómo evitar la formación de acrilamida patatas
Está claro que mientras la ciencia, la tecnología y la industria buscan una solución, todavía son muchas las cosas que puedes hacer para evitar que las patatas fritas que comes sean una fuente de acrilamida. Por eso, desde Dónde Comer Sano queremos recomendarte una serie de consejos clave al hacerlas en casa:
- La cantidad de almidón que contienen las patatas está directamente relacionada con la producción de esa sustancia. Por esa razón, se recomienda desechar aquellas que tienen gnomos, ya que cuando estos aparecen, el contenido de almidón es superior.
- En lo que respecta a la eliminación de parte del almidón natural en patatas, hay un truco realmente sencillo que consiste en colocar las patatas ya peladas y cortadas solo 5 minutos en agua caliente. Con esto, se elimina buena parte del mismo reduciendo la posibilidad de que se forme el compuesto.
- Por otro lado, cabe señalar que la formación de acrilamida es más frecuente en casa que en los restaurantes. Esto se produce por el menor control de la temperatura de cocción. En este caso, para conseguir conocer la temperatura, es mejor pasar de la sartén a una freidora. Y la temperatura debe ser siempre inferior a los 170 grados, tanto las de aceite, como las de aire caliente.
¿Qué dice la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC) sobre la acrilamida patatas?
La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC) ha asignado a la acrilamida la categoría 2B en su escala de clasificación de carcinogenicidad, lo que significa que la considera «posiblemente carcinogénica para los humanos». Esta clasificación se basa principalmente en evidencia obtenida de estudios en animales de laboratorio, donde se observaron ciertos indicios de que la exposición a la acrilamida podría aumentar el riesgo de desarrollar tumores.
Sin embargo, es importante señalar que la extrapolación directa de resultados de estudios en animales a los efectos en la salud humana tiene limitaciones, ya que los sistemas biológicos y las respuestas a sustancias químicas pueden variar entre especies. Además, aunque se han llevado a cabo investigaciones en humanos para evaluar la relación entre la acrilamida y el riesgo de cáncer, los resultados han sido mixtos y no concluyentes.
La afirmación de que se necesitan más investigaciones para comprender completamente el impacto de la acrilamida en la salud humana destaca la necesidad de estudios adicionales que aborden las lagunas en nuestro conocimiento actual. Esto puede incluir investigaciones epidemiológicas más extensas, estudios de exposición a largo plazo y una mejor comprensión de los mecanismos biológicos mediante los cuales la acrilamida podría afectar la salud humana. Este enfoque procura obtener una imagen más completa y precisa de los posibles riesgos asociados con la exposición a la acrilamida a través de la dieta.
Acrilamida patatas y otras cuestiones relacionadas con tu salud en los restaurantes de la guía Dónde Comer Sano
Como comentábamos en el párrafo anterior, es menos probable que aparezca la acrilamida patatas que consumes en los restaurantes porque existe un mayor control de la temperatura del aceite y se suelen llevar a cabo procesos de remojo previo de las mismas.
Sin embargo, más allá de poner todas las medidas necesarias para prevenir la prevención de acrilamida en las patatas, en la red Dónde Comer Sano vamos un paso más allá. Los restaurantes que puedes encontrar fácilmente organizados por localización y categorías en el buscador tienen una serie de diferenciaciones con respecto a todos los demás. Todos ellos reciclan correctamente sus aceites contribuyendo a la mejora del medioambiente. Además, algunos tienen proveedores especializados para el cambio periódico de los filtros del mismo para garantizar una mejora de la calidad de la alimentación. ¿Aún no has encontrado tu próximo local para ir a comer o cenar? ¡Búscalo ahora! Es completamente gratis.